En el día mundial de la bicicleta que se celebra este 3 de junio, expertos de la Universidad Católica del Maule, explican por qué se debe fomentar el uso de este Vehículo de Impacto Positivo (VIP), que cuida no solo el medio ambiente, sino también la salud de las personas.
El primer punto que destacó Juan Pablo Hernández, coordinador del Programa Campus Sustentable de la UCM sede Curicó es que la bicicleta es un excelente medio de transporte ante episodios de emergencias y crisis como lo es la actual pandemia, tal como lo ha señalado la Organización Mundial de la Salud y el Núcleo Milenio Movilidades y Territorios (MOVYT).
Al respecto, Juan Pablo Hernández, dijo que “Andar en bicicleta permitiría mantener distancia física de otras personas, en el caso de quienes deben seguir trabajando, sin duda es una buena opción porque podría evitar aglomeraciones en el transporte público, así lo han destacado organismos internacionales”.
Aspecto con el que coincide Leyla Juri, académica de la Escuela de Nutrición de la UCM sede Curicó, donde señala que “Es un medio de transporte personal que reduce el riesgo de contagio.
La primera recomendación para las personas que actualmente utilizan la bicicleta para trasladarse, es que no olviden usar sus elementos de protección personal como casco y chaleco reflectante, luces si se circula de noche, también es necesario limpiar las manillas o manubrio de la bicicleta antes de usarla, para evitar contaminación y riesgo de contagio”, comentó. Movilidad sustentable
Pero sus beneficios no terminan ahí, ya que, al ser un Vehículo de Impacto Positivo con el medio ambiente, su uso permite una movilidad sustentable, que ayuda a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), producidas por el transporte convencional a combustión y quema de combustibles fósiles. “Indirectamente, disminuye los costos energéticos que se producen al refinar y transportar combustible fósil y otros insumos, al utilizar la tracción humana”, detalló Juan Pablo Hernández, coordinador del Programa Campus Sustentable de la UCM sede Curicó.
Según explicó Juan Pablo Hernández, en términos de contaminación acústica, la bicicleta disminuye el nivel de ruido sobre todo en zonas muy urbanizadas, donde el ruido aumenta en forma significativa. “Además, es accesible al bolsillo de las personas, ya que existe una alta oferta disponible, por lo que podemos encontrar buenos precios en el mercado, generando beneficios económicos por ahorro, ya que no se gasta en transporte público o vehículos particulares”, mencionó.
Cuidado de la salud
Desde que se decretaron las cuarentenas, el Home Office ha sido la nueva manera de trabajar y junto con las salidas, también ha disminuido la posibilidad de realizar actividades recreativas y deportivas. Leyla Juri, docente de la Escuela de Nutrición de la UCM, dijo que la bicicleta como medio de transporte, mejora el sistema cardiovascular y reduce hasta en un 50% el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas, es un ejercicio popular por fortalecer el corazón y pulmones, también
aumenta los niveles de energía.
“Fortalece músculos de todo el cuerpo y articulaciones, ya que es un ejercicio completo. Andar en bicicleta pone menos estrés en las rodillas, tobillos y columna, que otras formas de ejercicio como correr, trotar, caminar, levantar pesas o ejercicios aeróbicos en el gimnasio. Además, el ciclismo es gentil con las articulaciones y preserva el cartílago, ofrece una gran opción de bajo impacto para aquellos que sufren de dolor muscular, problemas en los pies o rodillas, lesiones de cadera y dolor de espalda”, explicó Leyla Juri.
Y agregó que “Ayuda a bajar los niveles de estreñimiento y alivia la sensación de hinchazón después de comer, la actividad física reduce la cantidad de tiempo que el alimento permanece en el intestino grueso. También contribuye a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión. Estudios han mostrado que el ejercicio incrementa las endorfinas en el cerebro, las cuales ayudan a mejorar el estado emocional, reduciendo la acumulación de adrenalina y cortisol, eliminando niveles de estrés. El habitual movimiento circular que ofrece pedalear relaja al cuerpo ayudando a regular las emociones, respiración y movimiento”.
Respecto a las calorías quemadas en cada paseo en bicicleta, va a depender de la intensidad y duración de esta actividad, pero en promedio se pueden quemar entre 150 y 200 calorías en intensidad media, que es lo que corresponde a un paseo de 20 minutos de una persona de 70 kg
aproximadamente.
Ahora, solo debes sumarte y usar la bicicleta para transportarte, permite sentirse relajado,
energizado y más feliz.