La denuncia hecha por internas de la Cárcel de Talca, de supuestos maltratos y abusos por gendarmes, ha traído varios coletazos, ya que desde la institución dijeron que se hará un sumario para investigar estas prácticas, pero también han salido nuevos testigos que aportan información al tema y dan antecedentes de una posible red de corrupción dentro de las penitenciarias, donde hay transacciones de aparatos electrónicos y alcohol, entre otros.Fernanda Amaro, ex interna de la Cárcel de mujeres de Talca, es la encargada de hacer estas denuncia y sostiene que estas prácticas de maltrato son habituales, tanto de hombres y mujeres de la institución, donde son normales las golpizas y abusos de poder.
En tanto menciona que la ingesta de alcohol y drogas son habituales, las cuales serían ingresadas por los mismos gendarmes y comercializadas con las internas, es sólo cosa de pedir y poder pagar, el resto se encargan los funcionarios, relata la joven. Posteriormente al comercializar estos productos, los gendarmes cuando ven a las internas ebrias o drogadas las golpearían brutalmente, por otro lado, la ex interna, dice que existirían relaciones lésbicas entre funcionarios y reclusas.
En tanto gendarmería dijo que estos antecedentes serán agregados a la investigación y de ser encontrado algún culpable, se aplicará el rigor de la ley. Mientras tanto insisten que esto se dio por desbaratar una red de drogas en la Cárcel y que las acusaciones son producto de esto.