En la plaza de armas de Talca, la Directora regional del INJUV, Irene Muñoz y el Director (s) regional de CONAF, Dante Bravo, se realizó la despedida a los 40 jóvenes de la Región del Maule que serán parte de los 450 voluntarios de todo el país que trabajaran en 9 Áreas Silvestres Protegidas (ASP), ubicadas en las regiones del Maule, Biobío, Araucanía y Los Lagos, en el marco del programa “Vive tus Parques”.
En la región del Maule serán 80 los jóvenes que trabajarán por 10 días, realizando labores de habilitación y mejoramiento de Áreas de uso público de las ASP, trabajo en el control de amenazas y especies invasoras y vinculación con las comunidades aledañas en la Reserva Nacional Altos de Lircay y el Parque Nacional Radal Siete Tazas.
En este sentido, la máxima autoridad regional de INJUV, Irene Muñoz manifestó que “estamos muy contentos de que jóvenes tanto del Maule como de otras regiones puedan venir y trabajar por primera vez en áreas silvestres protegidas de nuestra zona y mostrar que la juventud está muy interesada y comprometida en temáticas de protección del medio ambiente”.
Además, la autoridad recalcó el trabajo que se desarrollará durante el programa. “Se realizarán instancias teórico-prácticas en que los voluntarios en conjunto con los Guarda parques puedan, por un lado, generar un espacio para que los jóvenes se capaciten y reconozcan el valor del patrimonio natural y cultural representado en estas áreas, y por otro, realicen actividades que contribuyan a la puesta en valor de dicho patrimonio”, comentó Irene Muñoz.
El voluntario Francisco Marín, se mostró muy motivado por ser parte de la iniciativa pues “esta una instancia muy buena para conocer la zona, soy de Curicó y de repente uno se preocupa mucho de conocer otras zonas del país y olvida que en tu misma región hay lugares muy lindos. Además, para mí como joven es muy importante generar conciencia ambiental y colaborar con un granito de arena en el mejoramiento de estos lugares”.
Finalmente, Dante Bravo, Director (s) regional de CONAF destacó el sacrificio de los jóvenes voluntarios. “No es fácil dejar la comodidad de la casa, el cariño de los padres, las entretenciones habituales y viajar, algunos desde muy lejos, para venir a conocer una realidad diferente conviviendo con ambientes naturales realmente hermosos y que incluso admiran turistas extranjeros”, expresó.