El director general de la Policía de Investigaciones Héctor Espinosa Valenzuela, ha dispuesto la baja de inmediato de 10 efectivos de la institución por asistirle la convicción de que dichos funcionarios incurrieron en conductas inaceptables y contrarias a la doctrina institucional, transgrediendo los principios de probidad administrativa establecidos en la ley y en las normas consagradas en el código de ética de la PDI.
De ellos, 9 ya fueron detenidos por los delitos de robo con intimidación, hurto, infracción al artículo 22 de la ley orgánica de la PDI, obstrucción a la investigación y cohecho agravado.
Producto de los controles internos que efectúa permanentemente la PDI, esta investigación estuvo a cargo de detectives del departamento V de asuntos internos junto al ministerio público, quienes concretaron las órdenes de detención emanadas del juzgado de garantía de San Antonio, en contra de personal de distintas unidades, los que a consecuencia de las indagaciones antes detalladas, actualmente se encuentran suspendidos en el marco de un sumario administrativo dispuesto en diciembre de 2014, por el mando correspondiente.
El director general en nombre de la Policía de Investigaciones de Chile, expresa su irrestricto compromiso y apego al estado de derecho vigente, enfatizando a la opinión pública que no aceptará que personal bajo su mando se aparte de la ética y doctrina institucional, adoptando las más drásticas sanciones contempladas en la normativa vigente.