Los camioneros que comenzaron una manifestación desde La Araucanía el lunes tenían presupuestado culminar la protesta frente a La Moneda durante esta jornada, exponiendo las máquinas que han resultado quemadas en los últimos meses, junto con entregar una carta a la Presidenta Bachelet, para así buscar una solución a la situación de violencia que se vive en el sur del país.
Sin embargo un decreto emanado desde la Seremi de Transportes de la Región Metropolitana prohíbe la circulación de vehículos de carga de más de dos ejes, remolques o semirremolques desde el kilómetro 55 de la Ruta 5 Sur, hasta el kilómetro 0 y desde kilómetro 54 al 0 de la Ruta 68.
Paulatinamente, los camioneros en la Región del Maule, se fueron sumando a la movilización a nivel nacional. Una de ellas fue el corte de la ruta cinco sur a la altura de Linares, tanto en el kilómetro 298 y 299, oriente y poniente de la vía, aunque sólo se autorizaba el paso de vehículos de emergencia o de transporte de cargas peligrosas.
La molestia de los camioneros ya había ocurrida el pasado martes, por no permitir el ingreso a las ciudades de la caravana
Los miembros de la Confederación de Transportes de Carga de Chile (CNTC) iniciaron la manifestación en señal de protesta por la gran cantidad de camiones quemados registrados durante este último tiempo y por la impunidad en la que, a su juicio, quedan estos actos.
Cerca de las 21:00 horas de anoche, un pequeño grupo de camiones provenientes de La Araucanía logró ingresar a Santiago, circuló por La Alameda y pasó raudamente frente a La Moneda, en lo que se ha configurado como una de las movilizaciones más mediáticas y peor manejadas -por ambas partes- en lo que va del año.
Recordemos que esta manifestación se originó luego de que un grupo de empresarios del transporte, comenzaran una campaña para solicitar el fin de la violencia en La Araucanía. Esto con apoyo de parlamentarios de la Unión Demócrata Independiente, quienes pese a encontrarse seriamente golpeados por el caso Penta y las irregularidades que lo rodean, dedicaron tiempo para actuar como voceros y representantes en este conflicto.
A las 21:30 horas, los dueños de las empresas de transporte, tras una breve reunión con el timonel de la UDI Hernán Larraín, ingresaron hasta La Moneda para conversar con el ministro Jorge Burgos.
Con esto se hizo un cambio en los planes, pues originalmente sólo se tenía contemplado entregar una carta en La Moneda, no realizar una reunión con el ministro de Interior.
En la misma línea, dio a conocer que en el texto solicitan mesas de trabajo y proyectos de ley para terminar con la impunidad y empoderar a los Carabineros, para que puedan controlar la delincuencia “desatada en la nación”.
El transportista también aseguró que ellos no están ligados a una corriente política, pese a que fueron vistos en una reunión con el timonel de la UDI antes de ingresar a La Moneda.
Por último, Burgos enfatizó en que con el diálogo se pudieron evitar males mayores, y explicó no siente que haya perdido por haber accedido a las peticiones acceso de los transportistas, porque para él “quien dialoga no se humilla”.