Hoy se firmó el decreto de alerta sanitaria ambiental que regirá entre las regiones Metropolitana y de Aysén, con el objeto de disminuir los episodios críticos de contaminación de aire en las ciudades de la zona centro sur que presentan mayores índices de material particulado fino, con el objeto de proteger la salud de las personas.
En decreto fue firmado por la ministra de Salud, Carmen Castillo; acompañada del ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier; y del subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows. La alerta sanitaria ambiental se decretó para la Región Metropolitana (52 comunas); Rancagua y Machalí en O´Higgins; Talca, Maule y Curicó en la Región del Maule; Chillán, Chillán Viejo y Los Ángeles en el Biobío; Temuco y Padre Las Casas en La Araucanía, Valdivia, Osorno y Coyhaique.
La alerta sanitaria ambiental busca atacar el MP2.5, que es la fracción más fina del material particulado y que considera las partículas de un tamaño menor o igual a 2,5 micrones. A diferencia del MP10, el MP2,5 es lo suficientemente pequeño como para penetrar en las vías respiratorias y llegar a los pulmones y los alvéolos. Las partículas finas tienen un tiempo de residencia en la atmósfera más largo, lo que hace que éstas puedan transportarse largas distancias.
Esto mientras el Ministerio del Medio ambiente avanza en la elaboración de 14 planes de descontaminación del aire, casi la totalidad de ellos por MP2,5, en el marco de su estrategia para el período 2014-2018.
Según explicó el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier, “para hacer frente a este invierno 2015 en materia de descontaminación atmosférica, lo que nos ha solicitado la Presidenta Bachelet es utilizar todos nuestros medios administrativos para evitar la exposición de la población a altos índices de contaminación atmosférica”.
Por ello, agregó, mientras se avanza en la estrategia de planes de descontaminación atmosférica, “se van a implementar alertas sanitarias ambientales en algunas ciudades del centro y sur de Chile, a efecto de disminuir las emisiones que se generan. A través de este decreto de alerta sanitaria ambiental se va a habilitar para que las autoridades regionales puedan implementar medidas adicionales a efecto de controlar las emisiones de material particulado”.
El ministro Pablo Badenier recordó que más del 90% de las emisiones de material particulado en la zona sur de Chile son de origen domiciliario, por el uso de leña como método de calefacción residencial. La implementación de una alerta sanitaria ambiental durante 2014 en 12 zonas del país, agregó el titular del Medio Ambiente, permitió que en 10 de ellas “hubo una disminución del orden del 20% de las concentraciones observadas, y también disminuyeron los días de episodios críticos. Por lo tanto, en el corto plazo y como medida de excepción, la alerta sanitaria nos permite evitar que la población esté expuesta a altos índices de material particulado”.
Por su parte, la ministra de Salud, Carmen Castillo, explicó que la medida, que rige hasta el 30 de septiembre de este año, responde a la necesidad de entregar “seguridad a las personas” y tiene como fundamento “las estadísticas que posee Salud Pública respecto al impacto que tienen (estos episodios) en las enfermedades respiratorias”. En ese sentido, reiteró que “hemos visto que con la declaración de alertas sanitarias en años anteriores, disminuyen las consultas respiratorias”.
La aplicación de Alertas Sanitarias, subrayó el Subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows, tuvo positivos efectos en la salud de la población durante el año pasado. “En las ciudades del sur de nuestro país, permitió evitar 25 mil consultas en los servicios de urgencias”, precisó. Para 2015, al agregar la Región Metropolitana y Coyhaique, se proyecta “evitar prácticamente 50 mil consultas adicionales. O sea, estamos hablando de 75 mil consultas menos a los servicios de urgencia, y lo más importante, evitará más de 500 muertes prematuras en nuestro país, causadas por los efectos de episodios críticos de la contaminación del aire”.
El decreto de alerta sanitaria faculta a los Seremis de Salud para dictar resoluciones acordes al nivel de contaminación que se haya alcanzado en las zonas afectadas. Por ejemplo, la prohibición de funcionamiento de fuentes fijas particulares, comunitarias e industriales que utilicen leña; la suspensión de actividades deportivas masivas, clases de educación física en establecimientos educacionales de cualquier nivel y actividades físicas al aire libre; restricción a vehículos con y sin sello verde, en el caso de la Región Metropolitana.