El presidente Piñera promulgó la ley que permitirá de forma voluntaria a
madres y padres sepultar con un nombre y apellido a un hijo que muere
antes de nacer.
A través del Registro Nacional de Mortinatos en el Registro Civil se puede
inscribir a los hijos que han fallecido en el proceso de gestación. Éste
permitirá la individualización con nombre y apellido, sexo y el nombre de los
padres. El proceso podrá realizarse en cualquier momento posterior a la
muerte.
Además, la ley podrá aplicarse de manera retroactiva en aquellos casos
ocurridos antes de su entrada en vigencia. Igualmente, para su inscripción se
necesita presentar cualquier documentación extendida por un profesional de
la salud que acredite la muerte fetal. O también, un documento de un
profesional de salud o una declaración simple ante el Registro Civil.